¿Última foto?

Pues la verdad, no lo sé. Pensaba que la última sería hace un par de semanas o así, pero el tema se va alargando como el que no quiere la cosa... Parece que ya estamos en Navidad, pero no. Bueno, según la tele, llevamos en Navidad unos cuantos meses, cosas de la publicidad. Porque yo no sé, pero cada año que pasa creo menos en ella. Bueno, ¿realmente he creído alguna vez en la Navidad? No lo sé, pero creo que nunca había creído tan poco como hoy.

Y es que hacer un comentario de Proyecto Integrado un domingo, nunca me había costado tanto como este, porque hoy es el día de la depresión tras la euforia. Euforia que viene dada por un "gran concierto" de ayer en San Fernando. ¿Y por qué lo pongo entre comillas? Porque de grande no tuvo absolutamente nada. Todo lo contrario, fue algo familiar, y eso fue lo que lo hizo realmente mágico. No tiene mucho que ver esto que estoy contando con la fotografía ni nada, pero quería aprovechar la ocasión para plasmar en un texto lo importante que es para el mundo de la música que haya grupos como el de ayer. Saurom. Un grupo cercano a los fans, que aunque últimamente estén saltando a la fama, siguen siendo fieles a nosotros, a sus paisanos.

Dicho esto, vamos con la foto. Repito lugar donde está realizada la foto: Barcelona. Ahora me estoy dando cuenta de que fue un viaje bastante productivo. Se aprende mucho viajando sólo. Lógicamente, no voy a contar otra vez mi experiencia en tierras catalanas porque ya lo hice con la foto de la simetría, así que en este comentario me limitaré a comentar algunas cosas sobre la propia foto.

Los colores son muy vivos, un tono anaranjado muy intenso y el contraste con el negro absoluto, que le da un aire especial. Eso en el tema del color. En el tema de la composición en sí, tuve que darme prisa en tomar la foto porque al ser una puesta de Sol, cada segundo estaba en una posición diferente. Me monté en la valla que delimitaba la cola para entrar al concierto y tomé la foto. Quise que saliera el árbol, la sierra por detrás y el Sol. En el momento de tomar la foto, no me fijé en el detalle de que el Sol está enmarcado por dos ramas, delimitando perfectamente su silueta. Si lo llego a hacer queriendo, no sale, pero al final quedó interesante. Otra cosa que la foto nos permite ver y que a simple vista no se apreciaba, eran las hojas, las cuales están picadas. Se puede apreciar que están picadas gracias a que la luz está por detrás de dichas hojas. Bueno, la regla de los tercios creo que la cumple y... No sé, creo que no hay nada más que comentar, ¿no? Bueno, un detalle que quiero dejar claro es que la foto NO ESTÁ RETOCADA para nada. Ni con el visor de fotos de Windows, ni Photoshop ni Picnik. Al natural.

Ahora sólo queda esperar a ver si Miguel ha acabado con el tema de las fotos o no. Eso sólo lo descubriremos mañana. Aunque es verdad, que el tema de la foto no ha hecho más que empezar...

¡Un abrazo!